A casi 10 dĆas de haberse realizado una importante manifestación contra el rĆ©gimen de NicolĆ”s Maduro, los llamados a protesta en las calles hechos por el presidente de la Asamblea Nacional y lĆder de la oposición, Juan Guaidó, no han sido atendidos por la mayorĆa de sus seguidores, como ocurrió este lunes.
SegĆŗn la encuestadora Delphos, el apoyo al lĆder polĆtico opositor se desvaneció 20%, pues pasó de 65% en enero a 45% en la actualidad.
Félix Seijas, director de la firma, explicó que esta situación se debe a que los venezolanos aún no tienen clara la estrategia del opositor.
“Uno de los problemas que hay en este momento para reactivar las manifestaciones es que las personas estĆ”n confundidas”, apuntó.
Seijas destacó que las ciudadanĆa viene de confiar en la idea que se generó a principios de enero, cuando Guaidó seƱaló que el cambio de gobierno ocurrirĆa por la vĆa rĆ”pida.
Aunado a ello, agregó Seijas, el mes de diciembre estĆ” cerca y la mayorĆa de los venezolanos aprovechan esta temporada del aƱo para intentar desligarse de las preocupaciones.
Sin embargo, aunque la gente no responda concretamente a los llamados hechos por Guaidó, en Venezuela ocurren casi a diario pequeñas manifestaciones con fines sociales por la falta de agua, luz, gas o medicinas.
En este momento, las enfermeras y maestros encabezan protestas por demandas salariales. También para exigir mejoras en el servicio educativo y sanitario. Asà como para la dotación de los centros de salud y colegios.
Configurar la estrategia
El reto de la oposición entonces es convertir y coordinar estas protestas con el fin polĆtico.
“El deseo de protestar todavĆa estĆ” presente. El asunto es por quĆ©, para quĆ© y cómo encaja en todo el proceso que involucra el llegar al objetivo final. El inicio de una transición”, sostuvo Seijas.
El tambiĆ©n analista y presidente de la firma DatanĆ”lisis, Luis Vicente León, aseguró que hay una pĆ©rdida de movilización en las calles porque no hay expectativas de que con ellas pueda ocurrir el cambio polĆtico.
En su opinión, la oposición debe trabajar en su estrategia que, seƱaló, debe incluir tambiĆ©n la vĆa negociada.
La protesta polĆtica puede volver a reactivarse. Pero para ello, sostienen los analistas, la oposición debe configurar, reorganizar y reestructurar su estrategia a mediano y largo plazo.
“Si se le da un sentido concreto a la protesta, si a la gente se le alumbra el camino y se le dice dónde estĆ” y hacia dónde va, sin lugar a dudas se puede porque la molestia estĆ” allĆ. La energĆa todavĆa estĆ” allĆ”, dijo Seijas.
En opinión de León, la oposición necesita reconstruir la esperanza, y la percepción que tiene el paĆs sobre el costo y el beneficio de la protesta.
En su lado mÔs negativo, la protesta puede implicar detenciones, lesiones o incluso la muerte. Pero para que se asuma este riesgo, el ciudadano debe sentir que su presencia en las calles traerÔ algún beneficio a su lucha, explican los analistas.
EFE