Los venezolanos dejarÔn a un lado el jueves los rigores de la brutal crisis que azota a la nación para sumergirse por unas horas en la elección de la nueva Miss Venezuela, uno de los espectÔculos mÔs populares de la televisión local.
La realización del certamen ha generado gran expectativa debido a que por primera vez, en casi siete décadas de historia del concurso, no se mencionarÔ las medidas de cintura, cadera y busto de las concursantes, una decisión que los organizadores atribuyeron a un intento por alejarse de la "mujer estereotipada".
Al hablar de las innovaciones que tendrÔ el show, que se transmitirÔ a partir de las 7 pm (hora local) por Venevisión, el presidente de la empresa de entretenimiento Cisneros Media, Jonathan Blum, dijo el jueves a la emisora local Onda La Superestación que serÔ mÔs corto, de unas tres horas, y se centrarÔ en dar a conocer a las 24 concursantes y su realidad. El evento se verÔ en el exterior a través de la empresa de cable DirecTV y el canal de televisión por suscripción Ve Plus.
El directivo dijo que el Miss Venezuela estÔ muy enfocado adaptarse a los nuevos patrones de los concursos internacionales, que aseguró que ya "no estÔn buscando una mujer que sea nada mÔs bella por fuera sino una mujer que se sienta confiada en sà misma".
El show se realizarĆ” en uno de los estudios de Venevisión, que desde hace varios aƱos se ha convertido en la sede del evento luego que el paĆs entró en una compleja crisis económica, dominada por una hiperinflación de seis dĆgitos y una fuerte recesión, lo que obligó a recortar los gastos del certamen.
Anteriormente la elección de Miss Venezuela se hacĆa en un gran estadio de la capital con un fastuoso espectĆ”culo que se extendĆa por mĆ”s de cuatro horas.
Con estos cambios el Miss Venezuela, que durante su historia ha logrado para el paĆs suramericano siete coronas de Miss Universo y seis de Miss Mundo, aspira dejar atrĆ”s el escĆ”ndalo que se desató el aƱo pasado y que involucró a varias exconcursantes, acusadas en redes sociales de recibir beneficios a cambio de relaciones con figuras del gobierno.
A la crisis se sumó la salida de Osmel Sousa, el llamado "Zar de la Belleza" venezolana, de la dirección de la Organización Miss Venezuela que manejó por cuatro décadas.
La dirección de la organización fue entregada en el 2018 a las ex Misses MarĆa Gabriela Isler, Miss Universo 2013; Jacqueline Aguilera, Miss Mundo 1995, y Nina Sicilia, Miss Internacional 1985, quienes debieron asumir la reestructuración del certamen y limpiar su imagen.
AP